La Tercera Sección Electoral de la provincia de Buenos Aires definió este domingo 7 de septiembre parte clave de la renovación de la Cámara de Diputados bonaerense, en el marco de las elecciones legislativas. Según datos oficiales del centro de cómputos provincial, con el 84% de las mesas escrutadas, el peronismo nucleado en Fuerza Patria (FP) alcanzó un 53,78% de los votos, lo que le aseguró 10 de las 18 bancas en disputa.

La fuerza liderada a nivel provincial por el gobernador Axel Kicillof y que llevó como primera candidata a diputada a la vicegobernadora Verónica Magario consolidó así su dominio en el principal bastión electoral del conurbano bonaerense. Con 1.414.849 votos, FP superó ampliamente a la principal fuerza opositora, La Libertad Avanza (LLA), que sumó 752.989 sufragios, equivalentes al 28,62%, y se quedó con 6 bancas.

La oposición aseguró representación, pero quedó lejos

El bloque de La Libertad Avanza, que en la provincia se enmarca como la principal alternativa al oficialismo, impulsó como primer candidato a Maximiliano Bondarenko, bajo el liderazgo nacional del presidente Javier Milei. Pese a consolidarse como segunda fuerza, su desempeño no alcanzó para disputar la hegemonía del peronismo en esta región del territorio bonaerense.

En tercer lugar se ubicó el Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT), encabezado por Nicolás del Caño, con 150.824 votos, lo que representó un 5,73% del total. Con ese caudal logró 2 bancas, superando el piso del 8,33% requerido para acceder a la Legislatura.

Por su parte, la fuerza Nuevos Aires (NA) cosechó 85.171 votos, es decir un 3,23%, mientras que Somos Buenos Aires (SBA), con el radical Pablo Domenichini como primer candidato, obtuvo 75.488 votos, equivalentes al 2,86%. Ninguno de los dos espacios logró superar el umbral necesario para obtener representación parlamentaria.

Un distrito clave en la Legislatura bonaerense

La elección en la Tercera Sección tuvo especial relevancia por la magnitud del padrón y por el número de bancas en juego. En total, se renovaron 18 escaños en la Cámara de Diputados provincial, lo que otorga a este distrito un peso determinante en la composición legislativa.

El oficialismo provincial consiguió retener una mayoría significativa, lo que le permitió proyectar un control más cómodo en la Cámara, mientras que la oposición libertaria capitalizó un caudal importante de votos, aunque insuficiente para disputar la supremacía de Fuerza Patria.

La jornada electoral se desarrolló con normalidad en los distritos de la región, consolidando a la Tercera Sección como el territorio de mayor respaldo para el peronismo en la provincia.