El sueño de la casa propia se mantiene como una utopía para millones de argentinos. Con la reciente actualización del salario mínimo vital y móvil, un cálculo revela que un trabajador que percibe ese ingreso necesitaría 85 años de su sueldo completo para poder comprar una vivienda de 100 metros cuadrados en la Ciudad de Buenos Aires. Aunque representa una leve mejora frente a los 129 años que se requerían con el salario anterior, la cifra sigue siendo dramática y coloca a la Argentina como el país más inaccesible de América Latina para acceder a una propiedad.
El valor surge de cruzar el precio promedio del metro cuadrado en CABA, que ronda los 2.358 dólares, con el nuevo salario mínimo, fijado en 313.400 pesos, y una cotización del dólar a 1.350 pesos. Con estos datos, el ingreso mensual equivale a apenas 232 dólares, lo que arroja un total de 85 años necesarios para alcanzar los 235.800 dólares que cuesta, en promedio, una vivienda de 100 metros cuadrados.
En comparación con otras ciudades de la región, la situación argentina es la más desfavorable. Mientras que en Buenos Aires hacen falta 85 años de salario mínimo para adquirir una propiedad de esas características, en Río de Janeiro se necesitan 65, en Lima 64, en Ciudad de México 56, en Montevideo 46 y en Quito, la ciudad más accesible del continente, apenas 22 años.